Amador Vidal y Francis Lema campeones de España de rallyes de Tierra

Amador Vidal y Francis Lema a bordo del Volkswagen Polo Proto Disiclín lograron este fin de semana en la localidad cacereña de Riolobos hacerse con el Campeonato de España de Rallyes de Tierra, entorchado que ningún gallego había vuelto a alcanzar desde que Guillermo Barreras lo lograse allá por 1985

La batalla con Jorge Del Cid, principal rival para alcanzar el entorchado fué épica, de las que hacen afición. El riojano se hizo con las dós primeras especiales del día, acabando el primer bucle catorce segundos por delante de Amador Vidal, lo que le daría el entorchado nacional. Amador reaccino antes de acabar la primera mitad del rally, encadenando dos scratchs para irse a la asistencia larga con poco más de cuatro segundos de ventaja. La tarde se presentaba apasionante en los embarrados tramos extremeños.

Y empezaron cumpliendo con el guión que más emoción podría dar a la carrera: Amador Vidal pinchaba en el primer tramo de la tarde, y perdía ocho segundos con respecto a Del Cid, que se ponía lider de la carrera con poco más de tres segundos de ventaja sobre el equipo de ARVidal Racing.

Pero toda esa emoción desaparecería en el sexto tramo de los nueve del rallye: Jorgue Del Cid y Nerea Sagarna sufrían un fuerte golpe en la trasera de su Mitsubishi EVO X, y arrancaban una rueda. La suerte estaba echada. Ahora al equipo formado por Amador Vidal y Francis Lema solo les hacía falta que su Polo Disiclín los llevase hasta la meta cuando apenas quedaban tres tramos por disputar. Todo el equipo humano de ARVidal Racing se desplazó a la llegada del último tramo donde Amador y Francis fueron recibidos entre aplausos, abrazos y lágrimas.

El campeonato más competido de los últimos tiempos, con pilotos de tanto renombre como el ganador del París-Dakar Naní Roma, o los Campeones del Mundo Xavi Pons, en WRC2, y el mexicano Benito Guerra en Gr.N, se venía para Galicia, hito que no se repetía desde que en el año 85 el vigues Guillermo Barreras lo lograra con un Renault 5 Maxi Proto.

Los tres últimos tramos el equipo de Vimianzo se dedicó a cumplir con el expeidiente de recorrerlos, dilapidando una ventaja de más e un minuto de ventaja que llevaba sobre el tercer clasificado, el joven mundialista Nill Soláns, al que finalmente cedió el triunfo del rallye por apenas dos decimas de segundo. Era lo de menos. Se había logrado el objetivo por el que en temporadas anteriores tanto se había luchado.

Texto y Fotos: ARVidal Racing